¡Hola, amante de la jardinería y la cocina! Te damos la bienvenida a otro artículo del blog de Viveros El Carrizal, tu centro de jardinería de confianza en La Ercina, León. Hoy queremos hablarte de las maravillas de cultivar tus propias hierbas aromáticas. Además de ser una alegría para los sentidos y un regalo para tus platos, las hierbas aromáticas son fáciles de cuidar y se adaptan a espacios pequeños. Por lo tanto, si tienes un pequeño rincón soleado en tu casa, ¡tienes un jardín de hierbas en potencia!
Albahaca: Esta hermosa planta verde brillante es una joya en cualquier jardín de hierbas. La albahaca ama el sol, así que colócala donde pueda disfrutar de unas buenas horas de luz solar directa. Con un poco de agua y mucho amor, pronto tendrás hojas frescas para añadir a tu cocina. ¿Y qué mejor manera de celebrar tu cosecha de albahaca que preparando un delicioso pesto casero? Sus hojas también son un gran complemento para las ensaladas frescas y los platos de pasta.
Romero: El romero es una planta resistente que, además de tener un aroma increíble, añade un sabor único a tus platos. Esta planta perenne prefiere un lugar soleado y suelo bien drenado. Sus hojas de sabor intenso son maravillosas en platos de cordero, pollo y patatas. Pero no te limites a la cocina, el romero también hace maravillas en cócteles y limonadas.
Cilantro: Aunque puede ser un poco delicado para cultivar, el cilantro es una de las hierbas más versátiles para tener en tu jardín. Prefiere un sitio parcialmente sombreado y suelo bien drenado. Sus hojas añaden un sabor fresco a los platos asiáticos y mexicanos. ¿Qué tal un guacamole casero con cilantro fresco para tu próxima fiesta?
Menta: La menta es una planta que crece con facilidad y rapidez, por lo que es mejor mantenerla en un recipiente para evitar que se propague demasiado. Hay muchos tipos de menta para elegir, desde la menta piperita hasta la menta de manzana. Puedes usar las hojas frescas para hacer una relajante taza de té de menta o para añadir un toque fresco a tus postres.
Perejil: Este clásico de la cocina es fácil de cultivar y proporciona una gran cantidad de hojas frescas. Prefiere el sol o la sombra parcial y un suelo húmedo pero bien drenado. Utiliza el perejil fresco para añadir sabor y color a tus sopas, salsas y ensaladas. Un plato delicioso y refrescante que puedes preparar es el tabulé, una ensalada libanesa con perejil, trigo bulgur, tomate, limón y aceite de oliva.
Tomillo: Esta es una planta maravillosa para tener en tu jardín de hierbas. El tomillo es una planta resistente que tolera bien las condiciones secas y es conocido por sus propiedades culinarias y medicinales. Este arbusto pequeño y perenne prefiere un lugar soleado y suelo bien drenado. Sus hojas pequeñas están llenas de sabor y se pueden usar tanto frescas como secas. El tomillo es increíblemente versátil en la cocina. Puedes emplearlo para realzar el sabor de las carnes, especialmente en guisos y asados, y es un componente esencial en la mezcla de hierbas provenzales. También va bien con el pescado y las verduras, y puede añadir un toque aromático a tus sopas y salsas.
Es importante recordar que todas estas hierbas necesitan un buen drenaje. Asegúrate de que las macetas o camas de jardín en las que las plantas estén plantadas permitan que el agua fluya libremente.
Si te apetece iniciarte en el mundo de la jardinería de hierbas aromáticas, en Viveros El Carrizal estamos siempre listos para ayudarte. Ofrecemos una amplia variedad de plantas y todos los consejos que necesitas para cuidar de ellas. ¡Te esperamos en nuestro vivero en La Ercina, León! ¡Nos vemos pronto en el jardín y en la cocina!